Arquitectos e ingenieros firmarán hoy su Código de Ética

Las Habana, 19 ene. – Profesionales cubanos de la construcción suscribirán hoy, en esta capital, su Código de Ética, que establece la necesidad de contribuir a perfeccionar el asesoramiento al proceso inversionista en las obras del país.

Una representación de afiliados de la Unión Nacional de Arquitectos e Ingenieros de la Construcción de Cuba (UNAICC) firmará el documento, en la sede del Memorial José Martí, anunció Cecilia Santos Pérez, especialista en comunicación de la citada organización social.
   
Añadió que otro tanto harán con posterioridad sus restantes miembros en las 15 provincias, en el municipio especial de la Isla de la Juventud y en Moa, la región minero metalúrgica por excelencia de la nación, en Holguín y a 734 kilómetros de distancia de La Habana.
    
El texto en cuestión había sido aprobado en una de las sesiones del VII Congreso de la UNAICC, efectuado en diciembre pasado en el Palacio de Convenciones de La Habana.
   
Uno de sus principios plantea que no deben iniciarse obras sin antes haber efectuado todos los estudios técnicos y económicos indispensables, para su correcta ejecución, o cuando hayan sido señalado plazos incompatibles con una buena práctica profesional.
   
Igualmente hace énfasis en la introducción de enfoques y medidas, que contribuyan a la reafirmación de los conceptos de desarrollo sostenible en las acciones encaminadas a mitigar los efectos del cambio climático y otras graves consecuencias.
   
Incluso el Código de Ética de la Unión Nacional de Arquitectos e Ingenieros de la Construcción de Cuba refiere la necesidad del ahorro de los recursos humanos, materiales, energéticos y naturales.
   
La organización celebró el viernes 11 de este mes el “Día del Ingeniero Cubano”, cuando entregó los Premios a la Vida y Obra de la Ingeniería a personalidades destacadas por sus aportes, contribución a la formación de nuevas generaciones de expertos y distinciones nacionales e internacionales recibidas.
     
Esa efeméride quedó establecida en 1946 en homenaje a Francisco de Albear y Lara (1816-1887), cuya obra cumbre fue el acueducto que lleva su nombre, considerado una de las siete maravillas de la especialidad civil cubana.(AIN)