Expresidente egipcio nunca sufrió colapso, dictaminan médicos
El Cairo, 23 sep .- Disuelta la humareda del juicio en su contra y de los choques entre sus partidarios y opositores, el expresidente egipcio Hosni Mubarak emerge hoy como un gran simulador: nunca sufrió un colapso cardíaco.
Un equipo de expertos médicos que lo examinó a fondo acaba de diagnosticar que el hombre que dirigió Egipto durante 32 años con mano de hierro está en condición estable y jamás padeció el infarto aducido para posponer el proceso por crímenes de lesa humanidad al que fue sometido el año pasado.
El dictamen emerge en respuesta a una petición de Mubarak para ser trasladado desde su celda en la prisión de Tora, donde purga una pena de cadena perpetua, a un hospital cuenta habida su mal estado de salud.
Pero todo indica que La Esfinge o el Rais (presidente, árabe) como era conocido el exmandatario, que cumplió 82 años el 4 de mayo pasado, tiene una salud de hierro y debe conformarse con permanecer tras las rejas.
En junio los facultativos que lo atienden adujeron un agravamiento notable de salud y lograron transferirlo al Hospital de Maadi, en esta capital.
Mubarak, al igual que sus hijos, espera la celebración de nuevos juicios por enriquecimiento ilícito, corrupción administrativa y adquisición ilegal de bienes públicos aprovechando información privilegiada cuyo uso está condenado por la ley. (PL)