Al sur

Un abrazo a nombre de Los Cinco para internacionalista santacruceño

Un abrazo a nombre de Los Cinco para internacionalista santacruceñoUn médico de Santa Cruz del Sur sintió la necesidad de expresar su solidaridad con la causa de Los Cinco de manera explícita y directa, así comenzó una historia que lo involucra a él y su familia con los antiterroristas cubanos que cumplen injusta condena en las propias entrañas del imperio yanqui.

Por otra parte, en cuanto se abren las puertas de los calabozos en la prisión de Marianna, en La Florida, un hombre que cumple más de 13 años de indebido encarcelamiento, comienza a romper la rutina diaria a pesar del estricto régimen al que está sometido, no exento de fuertes limitaciones y tensiones.

Antonio Guerrero Rodríguez, el Tony de todos los cubanos, convertido en Héroe del estoicismo, al igual que sus cuatro hermanos: René, Gerardo, Ramón y Fernando, se ha comprometido con la Revolución cubana y el mundo a no claudicar jamás.

Buscan todos el espacio en las apretadas horas del indiscriminado encierro, para escribirle a los millones de amigos que ya tienen en el planeta, quienes conocen los pormenores de los sucios manejos empleados por el Gobierno de Estados Unidos para condenarlos arbitrariamente por luchar contra el terrorismo.

El doctor Justo Rey Fernández del Risco, antes de partir para Portugal, donde cumple misión internacionalista actualmente, le escribió a Antonio una misiva, donde le comentaba de su anterior labor internacionalista en la República Bolivariana de Venezuela, y las tareas que como médico ha sabido llevar a cabo en este territorio en beneficio de la salud de la población.

La familia del galeno quedó responsabilizada de informarle a éste, si la respuesta a su carta llegaba, de ser así, darle todos los pormenores.

“Cuando recibimos la contesta de Tony, todos en la casa nos sentimos felices. Enseguida nos dimos a la tarea de mandárselo a decir a mi esposo. El nos solicitó que se le enviara el texto de la carta, mi hija me la dictó y se lo pasamos íntegro por nuestro correo electrónico. El nos manifestó que le resultó emocionante leer cada una de las líneas, para nosotros fue igual”, expuso Dayamí Revolta Pacheco, enfermera especialista en cuidados intensivos.

Los detalles están implícitos: “Por hábito a las 5 y 30 a.m ya estoy en pie. En cuanto se abren las puertas de las celdas, sobre las seis, me dispongo a chequear los mensajes que me han llegado por el servicio de correo electrónico, puesto a disposición de los reclusos, con regulaciones…”, comenta Antonio.

Justo Rey Fernández del RiscoEl médico santacruceño le afirmaba en aquella oportunidad, en renglones bien delineados, que conocía cada detalle del bochornoso proceso al que el Héroe y sus camaradas de titánica batalla se han mantenido sometidos, durante más de 13 años en frías celdas.

El inicio del curso escolar llena de nuevos bríos a la estudiante de quinto grado Dayane Fernández Revolta, alumna de la escuela primaria José Martí.

“Tengo motivos para estar contenta, primero por el comienzo de este periodo tan importante para cada niño y niña de este país, donde la educación es gratuita. Cualquiera que lo desee puede estudiar. La otra razón es que le di a conocer a mi maestra Bárbara Muria el contenido de la carta enviada por Tony, ella se la leyó a todos mis compañeritos de clase, este primer día de curso. Todos aplaudieron y quieren comunicarse con él y sus cuatro hermanos. Los pioneros santacruceños sabemos que son antiterroristas, toda la humanidad debe conocerlo para que sean liberados ya”.

Este inaceptable encerramiento se ha convertido en fecundo: “Atiendo mi labor como maestro en el Departamento de Educación. Siempre voy a trabajar en alguna obra de mis pasteles o pinturas- comenta Tony- así como dedico el tiempo para el ejercicio en el patio…”

Destaca en otra parte de la significativa carta que “muchas veces sólo tengo tiempo para las cosas más urgentes,” y agrega: “Casi nunca miro la televisión para priorizar otras actividades”.

Antonio le da a conocer a Fernández del Risco que lee algunas cosas “hasta que pasa el conteo de las 10 p-m. Luego apago la luz por respeto a mi compañero de celda, y porque bien temprano vuelvo a repetir esa rutina”.

El Guerrero de apellido y firmeza explica como todos los mensajes que reciben él, René, Gerardo, Ramón y Fernando, “son una fuente constante de aliento, de alegría, de esperanza y de amor. Demuestran que tenemos muchos amigos apoyándonos y nos quieren”.

Al final de la cuartilla, que la familia Fernández Revolta, protege en el propio sobre donde esta llegó, el Héroe de la República de Cuba le envía a su nuevo amigo Justo Rey “un abrazo a nombre de Los Cinco”.

(Radio Santa Cruz)