Empresa del níquel en Cuba, 50 años de retos

Empresa del níquel en Cuba, 50 años de retosHolguín, 6 jun .- Con más de un millón de toneladas de concentrados de níquel aspira arribar la empresa Comandante Pedro Sotto Alba, del municipio de Moa, al aniversario 50 de su puesta en marcha ocurrida el 23 de julio de 1961. El arranque de esta industria netamente química, a pocos meses de la victoria del pueblo en las arenas de Playa Girón, fue considerado por su complejidad y trascendencia como el equivalente tecnológico de esa página épica.

Inspirados en el ejemplo de Fidel, conducidos por el magisterio revolucionario del Che Guevara y guiados en su materialización por el ingeniero Demetrio Presilla, los mil 304 trabajadores involucrados en el empeño echaron por tierra el vaticinio imperial de que nunca los cubanos la harían producir.

El historiador de la ciudad, Pablo Velazco Mir, señaló a la AIN la enorme alegría que representó para el estrenado colectivo conocer, al cierre de las operaciones del 31 de diciembre de aquel año, que habían procesado las primeras mil 493 toneladas de sulfuros mixtos de níquel más cobalto.

Refirió que en esos primeros tiempos los ritmos productivos resultaron relativamente bajos debido a la carencia de materiales y repuestos, y a la inexperiencia en una tecnología inédita a escala planetaria, como la de lixiviación ácida a presión.

Para entonces, recordó, con tres unidades de lixiviación, corazón del proceso de producción, la capacidad instalada rondaba las 17 mil toneladas, que aumentó luego por años con la construcción de una cuarta unidad o tren.

En 1966, precisó Velazco, la industria logró alcanzar las 11 mil toneladas y a partir de ese momento comenzó a elevar los rendimientos y estabilizarlos entre 15 y 20 mil anualmente.

Después de 1994, confirmó, convertida en la inicial entidad cubana de capital mixto (Moa Nickel S.A.), los ritmos productivos aumentaron hasta cerrar el 2010 con más de 37 mil toneladas, récord absoluto.

Medio siglo de crecimiento productivo sostenido es tiempo suficiente para demostrar que los cubanos sí pudimos y la hacemos producir y avanzar hacia nuevas cotas de eficiencia, subrayó Aldo Rojas Guerrero, fundador de la Sotto Alba y 60 años de labor ininterrumpida en la rama del níquel. (AIN)