Arcos que dan forma a mi ciudad

Mostrando profundas grietas, cual víctima de una guerra contra el tiempo o resultado de la indiferencia humana, el arco más que simple estructura que salva el espacio entre dos pilares o muros, constituye el reflejo de arte y estilos diferentes. No son aquellas monumentales estructuras que, en conmemoración a hechos relevantes, engalanan algunas plazas y calles del mundo. Ni siquiera los que adornaron alguna vez zonas céntricas de Cuba y aún hoy perduran, como es el Arco de los Obreros de Cienfuegos.

Son esas formas que silenciosamente acompañan portales, arquerías y ventanales.

Concentrados en mayor medida en la entonces ciudad intramuros, los arcos de medio punto, el rebajado y el carpanel formaron y son parte de las construcciones civil y doméstica, así como militares y religiosas.

Rompiendo con el cordón amurallado, llegaron a extenderse a barrios menos poblados, solares y cuarterías haciendo gala de escotaduras a relieve o sobresalientes cornisas.

Entre calzadas y avenidas de antiguas y modernas edificaciones, amplios portales alternan con estilos que difieren en cuanto a forma, presumiendo la mezcla entre la tendencia musulmana, árabe y hasta el gótico.

Llama la atención como en determinadas edificaciones religiosas se unen estilos que las hacen atractivas a los ojos del caminante. La composición de los arcos góticos, trebolados y de medio punto ofrecen a la vista una auténtica muestra de arte y misterio que hacen recordar aquella famosa obra de Kent Follett, Los Pilares de la Tierra.

Se suman a la diversidad constructiva del arco los conocidos vitrales, donde flora y fauna logran singular variedad cromática, unido a las disímiles formas de los diferentes períodos constructivos hasta alcanzar su propia identidad.

Si bien con el de cursar del tiempo las edificaciones devienen más funcionales que decorativas, como si el progreso fuera a devorar lentamente cualquier vestigio de arte decorativo en el arco, no son pocos los que prefieren incluir esta curvatura, además de otros elementos constructivos, en la vivienda moderna para hacerla más atractiva.

La amalgama de estilos, nuevas tendencias y aportes propios de la actualidad que vivimos, engalana los rincones de esta agraciada tierra y que ante la mirada de muchos se muestra como un colorido abanico. (Por Yaumara Vicet Villalta, AIN)