Península coreana: Tensiones y más tensiones
Beijing, 8 dic.- Con ejercicios de fuego real en varios puntos por parte de Surcorea, la situación en la península coreana solo registra acciones que apuntan al incremento de las tensiones, a pesar de los llamados a disminuirlas.
Además de las mencionadas maniobras, que se extenderán hasta el viernes, el presidente surcoreano, Lee Myung-bak, ordenó convertir en fortalezas militares las cinco islas de la zona fronteriza, incluida Yeongyeong, escenario de un incidente armado el pasado día 23.
Como parte de las reacciones al citado suceso, en el que la parte Norte respondió a disparos contra sus aguas jurisdiccionales hecho desde esa ínsula, Seúl comenzó a enviar panfletos hacia el territorio septentrional a través de la frontera y afirmó estar listo para reiniciar las transmisiones de propaganda contra la República Popular Democrática de Corea (RPDC).
Ese paso fue recomendado al Gobierno por la Comisión Nacional de Derechos Humanos, en tanto un funcionario del Ministerio de Defensa dijo que se analiza el momento propicio de reanudar lo que Pyongyang califica de provocación.
Con ese fin Surcorea instaló 11 altavoces a lo largo de la frontera luego de dar a conocer las conclusiones de la investigación sobre el hundimiento en marzo pasado de la corbeta Cheonan, que Seúl atribuyó a un ataque de torpedo de la otra parte. Esa última rechazó las acusaciones y pidió enviar expertos para investigar lo sucedido, pero la solicitud fue denegada.
Desde entonces ese ha sido un tema de tensiones, incluida la advertencia norcoreana sobre la destrucción de los mencionados equipos en caso de que se activen.
Cerca de ese territorio, Estados Unidos y Japón realizan hasta el próximo viernes las mayores maniobras militares conjuntas en la historia de sus relaciones, con la participación del portaaviones George Washington.
Fuera de la península también se registran sucesos que en nada alivian la situación, apreciable en los resultados de una reunión este lunes en Washington entre la Secretaria de Estado Hillary Clinton y los cancilleres Seiji Maehara, de Japón, y Kim Sung-hwan, de Surcorea.
Ese encuentro se convocó para analizar los recientes acontecimientos en el referido territorio, y de él se esperaba un pronunciamiento que diera fuerza a la propuesta china de sostener consultas de urgencias entre los países de las conversaciones a seis bandas para la desnuclearización de la península.
Pero allí solo se reiteraron las acusaciones contra la RPDC, a pesar de que la cita estuvo precedida por una conversación telefónica entre los presidentes Hu Jintao y Barack Obama sobre el tema, en la cual
el mandatario chino pidió una respuesta racional de todas las partes a fin de evitar el deterioro de la situación en la zona.
También insistió en la necesidad del diálogo y la negociación como vías para lograr la desnuclearización de la península, al advertir que ese escenario puede tornarse incontrolable
Presentada el pasado día 28 y apoyada por Rusia -el otro país activo en el proceso de las seis bandas-, la iniciativa de Beijing continúa a la espera de gestos de las otras partes para llevarla a la práctica.
Ante esta realidad, poco es el espacio para que las tensiones cedan. (PL)