Impotencia e incertidumbre en EE.UU. para solución al derrame de petróleo

Impotencia e incertidumbre en EE.UU. para solución al derrame de petróleoWashington, 1 jun.- Un ambiente de incertidumbre se apodera de los estadounidenses, impotentes para alcanzar una rápida solución al mayor desastre ecológico en la historia del país.

Luego del último fracaso en frenar el derrame de crudo a las aguas del golfo de México el sábado último, tras fallar los esfuerzos de la petrolera para taponar el pozo con barro y sellarlo con cemento en una técnica llamada "top kill" (sellado definitivo), la expectativa dio paso a la duda.

Los intentos proseguirán. Ahora la British Petroleum (BP) prepara la colocación de una campana de menor tamaño que otra, la cual no funcionó, pero la confianza en lograr el objetivo menguó y se amplia la debacle ambiental.

La situación parece complicarse aún más ante la posibilidad de que la llegada en junio de la temporada ciclónica desencadene fenómenos que bañen las costas y humedales estadounidenses con el petróleo que se escapa del fondo marino, una posibilidad que los expertos no descartan.

Por el área afectada ya circularon tormentas como Camille, que se abatió con fuerza en 1969 sobre la costa de Misisipí y el destructor huracán Katrina, en 2005, que puso en jaque al gobierno republicano del presidente George W. Bush.

Ya el líquido derramado es catalogado como el mayor desastre ecológico en la historia del país, más si a eso se une que sea proyectado sobre el sur de Luisiana, el temor no es infundado. Ese estado agoniza con lo que tiene ahora y con lo que le llegará, consideran expertos.

Lo que sucederá con esa contaminación es difícil de predecir, opinó Joe Bastardi, jefe de análisis de huracanes de gran envergadura en el portal de internet AccuWeather.com.

A estas alturas y tras varios intentos fracasados, el pronóstico es complejo. Según voceros de la petrolera británica, sería alentador si logran contener el vertido antes de agosto.

Mientras tanto, nuevas manifestaciones en Estados Unidos criticaron la gestión de BP y del gobierno.

La víspera cerca de 500 personas bajo una persistente llovizna desfilaron en Nueva Orleans en protesta por la tragedia y la forma en que se intenta encontrar una solución.

A cinco semanas del inicio y pese al uso de alta tecnología, BP fue incapaz de contener el desastre.

Hay ahora dos procesos en marcha. Perforar un pozo nuevo para cortar el actual, proceso que ha comenzado pero que tomaría otros dos meses, y el intento de cortar las tuberías dañadas usando robot y luego instalar un artefacto de contención que pueda retener el petróleo y finalmente intentar bombearlo a la superficie. (PL)