Camagüey: una semana que enriquece su cultura
Cuando el 2 de febrero la tradicional Diana Mambisa obsequió el primer saludo de cumpleaños y se descorrieron los telones de la celebración por el aniversario 496 de la Villa de Santa María del Puerto del Príncipe, una de las más antiguas de Cuba, ya muchos camagüeyanos se encontraban en el Parque Ignacio Agramonte para comenzar, con esta simbólica acción, la trigésimo tercera edición de la Semana de la Cultura.
A partir de ese momento, desde muy temprano y hasta bien entrada la noche, no han faltado en la ciudad la alegría y el entusiasmo de sus hijos. Sentimientos manifestados, principalmente, en las actividades de carácter recreativo y cultural que parten del cuidado y conservación del patrimonio y las tradiciones del legendario Camagüey.
Como confesó Andrés Morales Leal, presidente del gobierno municipal, son varias las motivaciones que han animado al pueblo a celebrar durante toda una semana. Por ejemplo, el centenario del compositor camagüeyano Jorge González Allué, la obra del escritor Juan Ramírez Pellerano; y el reconocimiento a los 55 años de la orquesta Ritmo Moderno, y los 160 del Teatro Principal.
Entre los más de 400 eventos planificados por la Oficina del Historiador de la Ciudad (OHCC) y las autoridades de la provincia, estuvo el “IV Simposio Desafíos en el Manejo y Gestión de las Ciudades”, en el cual participaron personalidades nacionales y foráneas.
Eusebio Leal, un eterno amante de la historia e identidad nacional, apuntó en el acto de apertura del evento la necesidad e importancia del espíritu colectivo para preservar los valores patrimoniales, pues “no se trata solamente de preservar una plaza, se trata de la preocupación pública encarnada en todos y cada uno de nosotros”.
Para Angélica Nápoles Rodríguez, estudiante del Preuniversitario Álvaro Morell, una de las actividades colaterales del simposio que mejor acogida tuvo fue la exposición “Orgullo, Compromiso, Responsabilidad, Somos Patrimonio", muestra auspiciada por la (OHCC) que evidenció los valores distintivos de los sitios proclamados Patrimonio de la Humanidad, entre ellos el Centro histórico de Puebla (México), La Habana (Cuba) y Alcalá de Henares (España).
La joven – devenida guía de esta propuesta cultural- considera que la misma cautivó al público: “por aquí han pasado muchas personas que me han manifestado curiosidad, por eso les he explicado el contenido de las fotos. Ha sido bello apreciar el respeto expresado por los camagüeyanos y los visitantes que se llegaron hasta la ciudad de los tinajones”.
La semana abrió opciones recreativas para todos los gustos. Así lo confirman quienes se inclinaron a participar en el “XXI Encuentro de Escritores de Camagüey”, uno de los espacios más importantes que concentró la atención de varias generaciones de literatos de la localidad, y en el que se intercambiaron experiencias y reflexiones en torno a la literatura y a la obra “Teatro Montuno”, escrita por Rómulo Loredo.
Superior en cuanto a representatividad y profundidad de las temáticas abordadas, el certamen despertó la inquietud creadora dirigida a plasmar mucho más el tema del patrimonio en las obras literarias, al decir de Estela Fernández Rodríguez, Especialista en Programación de la Biblioteca Provincial Julio Antonio Mella y organizadora del encuentro.
Como cada año el Histo-Camagüey superó la concurrencia de ponentes, según Mariela Balido Bastela, presidenta de la Filial camagüeyana de la Sociedad Cultural José Martí, “con cada edición nos percatamos que aumenta el interés por conocer de la historia, principalmente en las nuevas generaciones. Para Gilberto Espín Castellanos, jubilado de Investigación Forestal, esta coyuntura cumplió con los objetivos culturales para los que fue creado y “abordó temas que me han hecho sentir -sin chovinismo- orgulloso de ser camagüeyano de “pura cepa”.
La Radio constituye una fuente indispensable para el acercamiento a los valores patrimoniales, de ahí que los realizadores de ese medio de comunicación de las primeras villas fundadas de Cuba se reunieran, por estos días, para intercambiar experiencias y analizar aspectos relacionados con la calidad de los espacios comunitarios y la promoción cultural.
Porque “el artesano es parte del patrimonio de una ciudad, de un pueblo, de una región… un patrimonio vivo”, el jueves se desarrolló una “Feria de Arte Popular y Tradicional” en el que artífices de las manualidades de todo el territorio expusieron sus obras en la céntrica Plaza de los Trabajadores. A la camagüeyana Miriam Mestidor Loiser, miembro del Grupo Aficionado “Fidelio Ponce de León”, de la Casa de la Cultura Julio Antonio Mella, le pareció interesante esta oportunidad de exhibir “el fruto de su manos, de su corazón”, y expresó la satisfacción que le producía estar en contacto con el público a través de una típica sonrisa de agradecimiento.
En ese mismo lugar vio la luz “Leonor”, la muñeca de trapo más grande del mundo, una realización del proyecto comunitario camagüeyano Carsueños. Obra artesanal impresionante, la gracia de “Leonor” conquistó la curiosidad y la sorpresa de miles, tal fue el caso de la simpática Leire, una joven del País Vasco, España: “esta ha sido una de las maravillas que más me ha impactado de Cuba, la llevaré siempre en el recuerdo por la sencillez de su grandeza”.
Culmina la Semana de la Cultura correspondiente al 2010 en la antiquísima y risueña ciudad de Camagüey. Han sido innumerables los sucesos vividos en apenas siete días. Innumerables los buenos momentos, los amigos que encontramos… Las cámaras, llenas de fotos, le rememorarán a los más olvidadizos, dentro de algún tiempo, las presentaciones del Ballet, las exposiciones, los desfiles, las piezas artesanales. Mas estoy seguro de que a la vuelta de unos meses los hijos de esta tierra no necesitarán añorar tales imágenes para revivir lo acontecido, porque con su esfuerzo lograron alimentar la historia, esa que desde hace casi cinco siglos se escribe con el brillo propio y la luz de la villa principeña.
(Wilder Medina Morfa*/Radio Cadena Agramonte)
*Estudiante de Periodismo